
La sequía de los noventas
La década de los años noventa significó una sequía en títulos de liga, pero se ganó en dos ocasiones el campeonato de Concacaf en 1991 y 1993. También se conquistó la Copa Interamericana en 1991 al vencer al Olimpia de Paraguay en el Estadio Azteca, en el festejo del aniversario 75 del club.


Todo indicaba que ese año las Águilas se llevarían el campeonato, pues el paso era casi perfecto. Las victorias ya eran comunes y las resultados espectaculares: 8–1 al Correcaminos, 7–3 al Morelia, 8–2 al Querétaro y 4–3 a las Chivas del Guadalajara, entre otros. Cuando todo parecía perfecto para levantar el trofeo de campeones, Leo Beenhakker es destituido y, sorpresivamente, América no llega a la final de esa temporada.